A todos los gatos, especialmente a los que viven en el interior, les encanta jugar, los juguetes caseros para gatos son un buen inicio. Son los dueños quienes le dan al gato de la casa la oportunidad de jugar brindándole juegos y oportunidades de estimulación, incluso si al gato no le falta imaginación y cualquier cosa, como un papel de caramelo o una bola de papel de aluminio, puede convertirse en un juguete.
El juego del gato es importante tanto para los gatitos cachorros como para los gatos adultos. Para los gatitos, los juegos sirven como práctica para la vida adulta independiente, muchas veces simulando acciones de caza. Todos los gatos experimentan con gran diversión roles ofensivos y defensivos, ataques repentinos, persecuciones, emboscadas y técnicas de caza. El juego también es una parte integral del desarrollo de la conciencia social, los gatitos pequeños que no pueden jugar con otros gatos a medida que crecen, a menudo se vuelven gatos reservados o insociables cuando son adultos.
Para el gato adulto, en cambio, el juego no es solo una actividad física de movimiento, también un importante estímulo mental. Jugar es fácil y la mayoría de los gatos disfrutan de cosas más simples como hacer rodar una pelota con sus patas y perseguirla como locos.
Qué pasa en el cerebro del gato cuando juega
- El juego aumenta los niveles de serotonina, la hormona del “buen humor”, tanto para gatos como para humanos.
- En un ambiente estimulante el gato puede liberar energía física y emocional reprimida.
- Nunca juegues con tus manos
- Nunca debes estimular al gato con las manos para que juegue, de lo contrario cuando haya necesidad de acercarse a él, por ejemplo, para cepillarlo o darle un medicamento, puede pensar que estás jugando con él y por lo tanto atacar tus manos como una posible presa.
Cómo hacer que el gato juegue
Los gatos se divierten más si juegan estimulados por su dueño. Puedes jugar con tu gato en casa consiguiendo un palo y atando una cuerda o cinta hasta el final. Puedes colgar un objeto, como una pluma, y agitarlo cerca del gato comenzará a enloquecer. El gato puede perseguir, atacar, saltar y agarrar.Lo importante no es hacerlo correr vacío sino también darle la oportunidad de atrapar a su “presa” de vez en cuando para no generar solo frustración.
Es necesario para la salud física y psíquica del gato que cada día se creen verdaderas sesiones de juego para que se divierta y no se pase el día en casa durmiendo en el sofá. Pero debes tener en cuenta que no todos los juguetes son aptos para gatos, algunos incluso pueden resultar peligrosos.
Los rascadores y los gimnasios permiten que el gato trepe con seguridad y vigile todo a su alrededor desde arriba, tal vez incluso pueda esconderse y dormir si es necesario. Un juguete casero para gatos barato y fácil de conseguir son las cajas de cartón son la guarida ideal para sentirse protegido, ver a tu gato correr y saltar para esconderse en ella, rascandola en cualquier momento o simplemente espiarte con esos ojos grandes donde sobresalen las orejas de tu gato.
Las cosas más simples que tienes en casa a veces pueden ser las más divertidas, como bolsas de plástico o botellas de plástico con un poco de agua adentro. El gato hará rodar la botella mientras observa el movimiento mágico del agua. Sin embargo, hacer que tu gato juegue con bolsas de plástico a veces puede ser peligroso si no estás allí para controlarlo. Puede ocurrir que el gato quede atrapado en el asa de la bolsa y presa del pánico empiece a correr por la casa como un loco.
Top 5 juguetes caseros para gatos
- Papel de caramelo o una bola de papel aluminio.
- Un palo y atando una cuerda o cinta hasta el final.
- Una caja de cartón
- Bolsas de plástico o de papel de tamaño grande.
- Botellas de plástico con un poco de agua adentro.